A pesar de que la historia no es aburrida, hay una gran parte de la población que la considera árida y pesada, sobre todo los más jóvenes.
Aproxímate a la historia con la novela
Una buena forma de remediar esa concepción aburrida de nuestra disciplina es aproximarse a la historia mediante la novela.
Es evidente que la novela histórica es ficción, pero esta ficción no deja de basarse en hechos históricos, los cuales no suelen alterar.
De este modo, con la novela podemos hacer una primera aproximación a la forma en la que se vivía en la época, siempre que al autor se haya documentado bien, y también nos sirve para aprender de otra manera los reyes y los acontecimientos más importantes tanto de política interior como exterior.
Aprenderse la lista de reyes de un determinado país en un periodo de tiempo es aburrido, pero no lo es tanto si vamos viendo a esos reyes a través de una novela, con la cual nos vamos a aprender la lista sin esfuerzo y sin darnos cuenta, pues ya no tenemos que memorizar una lista de reyes inconexa, sino una lista en la cual los reyes se conectan por acontecimientos y por los personajes.
Hay novelas de todas las épocas
Lo bueno de la novela histórica es que lleva un tiempo de moda, de manera que hay novelas muy buenas de cualquier época.
Por nombras a algunos autores, si queremos conocer algo más sobre la época romana, tenemos las novelas de Santiago Posteguillo, que se ha convertido en un clásico de la novela histórica en época romana, gracias a lo bien que escribe y a lo bien que se documenta.
Cambiando de época, remontándonos a épocas más antiguas, tenemos todas las novelas de Christian Jacq, un famoso escritor francés que tiene las mejores novelas dedicadas al Antiguo Egipto.
Además, este autor es egiptólogo, por lo que la documentación a la hora de escribir la novela está fuera de toda duda. Con él disfrutaremos de una buena lectura a la vez que aprendemos mucho sobre el Egipto de los faraones, una época lejana que nos atrae a muchos.
Para finalizar, y centrándonos en España, Pérez Reverte nos puede enseñar muchas cosas del Barroco español gracias a su Capitán Alatriste, un famoso personaje que se ha convertido ya en un clásico de la literatura y que nos lleva por la época de Cervantes entre pelea y pela .