El Neolítico en la Península Ibérica

El Neolítico, se introduce en la Península Ibérica a través de la zona costera del Mar Mediterráneo. ¿Dónde podemos encontrar los asentamientos más antiguos?  Los yacimientos de mayor antigüedad aparecen en la zona del Levante, en la cuál los arqueólogos creen ver a la aparición de un grupo colonizador que pudo expandir el Neolítico a través del pastoreo.

Introducido plenamente en la Península Ibérica, el Neolítico se desarrolla en una gran cantidad de puntos peninsulares entre los que se incluyen, las costas Cantábrica y Atlántica, e interior de la meseta. Una diversidad de ambientes que creó un  que Neolítico muy heterogéneo, del que en su etapa final surgirán toda  una serie de grupos con tradiciones culturales bien diferenciadas.

Cronológicamente el Neolítico de la Península Ibérica se divide en:

Neolítico Antiguo (5200-3500 a.C), en el que se realiza el arte que hoy conocemos como macroesquemático  y las cerámicas de tipo cardial.

Neolítico Medio (3500-2800 a.C), en el que se realizan cerámicas sin ningún tipo de decoración y pintadas en muchas ocasiones de rojo, además de comenzar a aparecer lo primeros poblados al aire libre.

Neolítico Final (2800-2500 a.C), en esta etapa, comienzan a aparecer nuevos tipos de enterramiento de tipo megalítico, se representan ídolos femeninos y se generalizan las pequeñas aldeas  con chozas circulares.